hipodromoUn hombre se encuentra desayunando y llega su esposa y le dice: Jorge, me encontré ésto en tu ropa, dice Marilú, ¿quién es ella? A lo que el hombre le responde: ¡Ahh! Lo que pasa es que fui al hipódromo y al caballo que le aposté se llamaba Marilú. Después de varios días, la señora le dice al marido en tono enojado: ¡Jorge, tienes una llamada telefónica de tu caballo! |